Quiénes somos

Somos los que por la mañana dudamos de la verdad que nos escupe el espejo.

Somos buscadores de belleza, de lo nunca dicho, de lo nunca leído. Buscadores de aquello que nos hace volar hasta no reconocernos.

Por eso preferimos el vaho que empaña los cristales, la niebla liviana que nos obliga a entrecerrar los ojos para ver, que nos muestra lo real en lugares imprevistos durante un segundo, antes de darse a la fuga.

Nos sumergimos, atravesamos el azogue y nos dejamos perder por callejuelas estrechas, oscuras; medinas laberínticas sin nombre, sin longitud ni hemisferio. Fez, Culiacán, Varanasi.

Buscamos esa parte débil del témpano por la que emerger y pisar arenas movedizas en la orilla de cualquier charco. Y encontrar allí literatura y tal vez un entricíclope.